Verónica Córdova Vega
Brenda Barrientos Serrano
Contaminación ambiental.
¿Qué es la contaminación ambiental?
Se denomina contaminación ambiental a la presencia en el ambiente de cualquier agente (físico, químico o biológico) o bien de una combinación de varios agentes en lugares, formas y concentraciones tales que sean o puedan ser nocivos para la salud, la seguridad o para el bienestar de la población, o bien, que puedan ser perjudiciales para la vida vegetal o animal, o impidan el uso normal de las propiedades y lugares de recreación y goce de los mismos.
Contaminación “una alteración desfavorable de nuestros medios, enteramente o en gran parte, debido a acciones humanas, mediante efectos directos o indirectos de cambios en las vías de circulación, niveles de radicación, constitución física y química y abundancia de organismos...”
Contaminantes son las sustancias nuevas introducidas en un medio y las sustancias cuya concentración normal en el medio se ha visto aumentada de modo importante, siempre que el resultado de tales interacciones sea la rotura de ciertos equilibrios con las consiguientes modificaciones en la estructura y función del ecosistema afectado. La consecuencias generales de
la contaminación en las propiedades macroscópicas de los ecosistemas no es distinta normalmente de las que producen una explotación.
Los agentes contaminantes se comportan de modo muy diverso. En unos casos es su cantidad lo que importa básicamente. Así sucede con el dióxido de carbono, componente normal de la atmósfera, cuya concentración en la misma puede aumentar como consecuencia de actividades humanas. Los ecosistemas tienen propiedades homeostáticas, es decir, de autorregulación, que les permite asimilar el aumento de concentración de un componente normal del medio sin experimentar grandes alteraciones.
Existen diferentes tipos de contaminantes:
Contaminantes Químicos: Se considera contaminante (agente) químico al elemento o compuesto químico cuyo estado y características
fisicoquímicas le permiten entrar en contacto con los individuos, de forma que pueden originar un
efecto adverso para su salud. Sus vías principales de penetración son la inhalatoria, la dérmica y la digestiva.
Los contaminantes químicos pueden provocar un daño de forma inmediata o a corto plazo (intoxicación aguda), o generar una enfermedad profesional al cabo de los años (intoxicación crónica).
Contaminantes Biológicos: Son organismos o restos de organismos que afectan la calidad del aire en espacios cerrados. Algunos de ellos pueden deteriorar las superficies, no sólo en interiores sino también al aire libre. Estos contaminantes se desplazan a través del aire y son a menudo invisibles. Entre los más comunes podemos mencionar las bacterias, el musgo, los mohos, la caspa de mascotas, la saliva de los gatos, los ácaros del polvo, las cucarachas y el polen. Las siguientes son algunas de las muchas fuentes de las que provienen estos contaminantes:
Contaminantes Físicos: Los contaminantes físicos son caracterizados por un intercambio de energía entre persona y ambiente en una dimensión y/o velocidad tan alta que el organismo no es capaz de soportarlo. Por varias razones el contaminante físico que más que otros está relacionado con la geología ambiental es la radiactividad (natural o artificial).
La radioactividad natural puede generar problemas ambientales por ejemplo en la cercanía de yacimientos de Uranio (y otros
minerales radioactivos).
Causas y efectos de la contaminación
Por culpa de nuestra especie, se ha llegado a poner en peligro la biosfera. Esta situación se relaciona con procesos tales como el crecimiento demográfico, el desarrollo industrial y la urbanización.
Estos tres procesos presentan una evolución explosiva y se encuentran íntimamente vinculados entre sí. La dependencia de la contaminación respecto de procesos tan complejos evidencia la dificultad de los problemas que se plantean. Por otra parte, los contaminantes pueden ser específicos de ciertos ecosistemas o, por el contrario, afectar a muchos al mismo tiempo.
Existe una diversidad enorme de contaminantes y, a su vez, los sistemas afectados son extremadamente complejos. Todo ello hace muy difícil y, por tanto, muy costosa la lucha contra la contaminación.
Para ello es imprescindible aplicar las leyes y principios en que se fundamenta la ecología. Como medidas generales se recomienda:
· Cultivar la tierra, evitando la degradación del suelo.
· Comprender la importancia de la fauna y tratar de conservarla.
· Proteger el hábitat natural mediante la creación de reservas.
· Utilizar los recursos mineros ajustándolos a las disponibilidades reales y aplicando la reutilización de los recursos hasta donde sea posible.
· Limitar los efectos de la contaminación ambiental, para lo cual es imprescindible desarrollar conciencia ecológica en la mayor parte de la población.
Nuestras propuestas de mejoras son que aunque se escuche muy poco, en la misma casa de haga conciencia de que materiales son contaminantes y evitar usarlos.
También se podría, si se vive en un residencial, tratar de hacer campañas y en este mismo ayudar al planeta.